Cuando una buena calabaza está dulce, se convierte en el ingrediente principal de deliciosos platos; bien sea haciendo con ella una sabrosa olla, una crema o simplemente asada en el horno sin más.

Ingredientes:(2 personas)

• 1 trozo de calabaza de 400g más o menos.
• 1 patata mediana.
• 1 puerro mediano.
• Aceite de oliva virgen.
• Pimienta.
• Sal

• Pela la calabaza y después de quitar todas las semillas, córtala en trocitos más o menos iguales.
• Limpia el puerro, reserva un trozo y corta el resto en trocitos.
• Pela la patata y córtala también en trozos más o menos iguales, para que se cuezan al mismo tiempo.

• Pon una olla con 5 o 6 vasos de agua al fuego y añade todas las verduras.
• Echa un chorrito de aceite de oliva y una pizca de sal, tapa la olla y deja que cueza a fuego lento durante una media hora.
• Tritura con la batidora las verduras y ves echando caldo hasta que se quede una crema fina y homogénea, si te gusta menos espesa añade un poco más de caldo.
• Prueba de sal y salpimenta a tu gusto.

• Corta unas tiritas finas del puerro que habías reservado, sofríelas en una cucharada de aceite de oliva y espolvorea con ellas la superficie. 

Espero que te guste.

La crostata es una tarta italiana que tiene la base de masa brisa o quebrada casera, rellena de mermelada y con un enrejado por encima.

Por lo que he podido leer, creo que la crostata tradicional, la más clásica, es la que se hace con mermelada de cerezas, pero también se puede rellenar con mermelada de melocotón, de fresa, o de la que se quiera; incluso con trozos de fruta, de crema pastelera y también las hay rellenas de chocolate.....

Como ya debes saber si sigues mi blog desde hace tiempo, soy muy tradicional en la mayoría de mis recetas, pero sobre todo con los dulces....me encanta conocer y hacer dulces tradicionales, sean de mi tierra, de cualquier lugar de España o del extranjero. Por eso, cuando en el reto Desafío en la cocina, Toñi de Que se cuece en mi cocina, nos propuso hacer una crostata me encantó la idea, ya que como he comentado antes, es un dulce tradicional italiano!!

• 300 g de harina.
• 150 g de azúcar.
• 150 g de mantequilla.
• 1 huevo entero y 1 yema.
• 1 limón.
• Una pizca de sal.
• Mermelada de mandarinas (o la que más te guste).

• Coge 5 mandarinas, 500g más o menos, límpialas bien bajo el grifo y quítales el trocito de piel de la parte de arriba.
• Corta las mandarinas en trocitos pequeños pero sin quitarles la piel, ten cuidado por si tienen algún hueso.
• En una cazuela pequeña pero alta, pon los trozos de mandarina a fuego medio, añade un chorrito de zumo de limón y remueve.
• Echa dos o tres cucharadas de sirope de ágave y mezcla bien. No te pongo cantidad exacta porque depende de lo dulces que estén tus mandarinas, yo la he ido probando hasta encontrar ese equilibrio entre dulce y amargo de las mandarinas....a mi me gusta ese punto amargo que tienen.
• Remueve continuamente para que no se pegue, durante unos 10 o 15 minutos.
• Con la batidora de mano, tritura la fruta hasta que se quede como tu prefieras, a mi me gusta que se note un poco la fruta, pero hazlo como más te guste a ti.
• Una vez triturado deja que se siga haciendo unos 10 minutos más y apaga el fuego, ten en cuenta que cuando se enfría se endurece un poco la mermelada.
• Deja que se enfríe antes de utilizarla.

• Pon en un bol la mantequilla cortada en trozos medianos.
• Añade el azúcar y mezcla bien aplastando con un tenedor.
• Añade el huevo y la yema, la sal y la ralladura de limón, mezcla todo bien hasta que todos los ingredientes estén bien unidos.

• Añade la harina poco a poco y ves mezclando con una espátula de silicona o con el gancho de la amasadora (que es como lo he hecho yo), hasta que veas que la masa está muy unida.
• Ahora saca la masa del bol, ponla en la encimera enharinada y sigue amasando con las manos, procura amasar rápido para evitar tocar mucho la masa porque se te pegará en las manos.
• Haz una bola con la masa y envuélvela con film transparente.
• Deja que repose en la nevera una media hora.

• Saca la masa de la nevera y estírala con el rodillo hasta que tenga un espesor de un centímetro más o menos. Para que la masa no se te pegue en la encimera pon un poco de harina, y para que no se te pegue en el rodillo puedes  poner la misma hoja de papel film con que la habías envuelto sobre la masa y luego pasar el rodillo por encima. No la hagas muy fina porque se rompe con mucha facilidad.
• Precalienta el horno a 180º.
• Unta el molde con mantequilla.
• Coge la masa con cuidado enrollándola con el rodillo, y luego la desenrollas por encima del molde con mucho cuidado.
• Dale la forma del molde apretando la base y los lados, recorta toda la que se sobresale pasando el rodillo por encima de los bordes, no te preocupes si se te quedan feos los bordes porque luego se meten hacia adentro.

• Rellena la crostata con una buena capa de mermelada.
• Haz una bola con todas la masa que te ha sobrado de los recortes y estírala con el rodillo, corta tiras para decorar la crostata; lo bonito es hacer las tiras con una ruedecilla en zig zag, pero como yo no la tenía las he hecho con un cuchillo.
• Para hacer el enrejado pon unas debajo y otras encima entrecruzadas, ten cuidado al hacerlo porque la masa es delicada y se rompen con mucha facilidad.
• Para terminar el montaje dobla los bordes hacia adentro, así la crostata queda más rústica y bonita.
• Hornea la crostata unos 40 o 45 minutos o hasta que veas que la masa está algo doradita.

Si quieres ver las riquísimas crostatas que han hecho mis compañeras de Desafío en la cocina pincha en la foto del logo!!

Como ya os he contado en alguna que otra ocasión, no os podéis imaginar lo que disfruto amasando, mezclando ingredientes, dando diferentes formas y viendo el resultado final cuando sale del horno, unas veces bien y otras no tanto, pero la verdad es que siempre está rico....y sobre todo, lo más agradable, es el aroma que sale del horno y que se queda por toda la cocina!!

Tengo varios libros para aprender a hacer "Pan", y de hecho la mayoría de los panes que tengo publicados los he sacado de ellos, en esta ocasión he seguido la receta, pan de leche, de Xavier Barriga. 

• 250g de harina de fuerza.
• 1 cucharadita de sal.
• 1 cucharada de sirope de ágave.
• 1 huevo.
• 25gr mantequilla.
• 125ml de leche. (la he puesto semi)
• 15gr de levadura fresca.
• 1 huevo para pintar.

• Saca la mantequilla una media hora antes para que se reblandezca.
• Calienta un poco la leche y disuelve la levadura en ella, reserva.
• Pon en un bol la harina, el huevo, la sal, el sirope y la mantequilla, mezcla bien.
• Añade la leche con la levadura y sigue mezclando y amasando hasta que te quede una masa firme pero lisa y fina.
• Forma una bola y deja que repose y leve hasta que doble su volumen, una hora más o menos.
• Amasa con las manos para quitar un poco de gas y corta porciones de unos 60g, haz unas bolitas con ellas.

• Estira con la palma de la mano o con un rodillo cada porción y enrolla doblando las esquinas hacia adentro para formar barritas sin punta, ponlas en una bandeja de horno con papel.
• Haz unos cortes algo profundos con un cúter o cuchillo que corte mucho y deja que leven unos 30 minutos más.

• Precalienta el horno a 250º.
• Pasado el tiempo de levado, pinta cada bollito con huevo batido, baja la temperatura a 230º y hornea unos 10 o 12 minutos.

• 1 solomillo de cerdo.
• 1 lámina de hojaldre.
• 2 dientes de ajo.
• 1 lata de pimientos del piquillo enteros.
• 2 cucharadas de mostaza.
• Perejil fresco.
• 1 huevo.
• Aceite de oliva virgen.
• Sal.
• Pimienta.

• Tritura o pica los dientes de ajo con el perejil.
• Añade dos cucharadas de aceite de oliva y la mostaza, tritura hasta que esté todo bien picado y mezclado, reserva.

• Limpia el solomillo quitándole toda la grasa y las telillas y nervios que pueda tener.
• Salpimenta toda la carne.
• Unta el solomillo con la salsa de mostaza reservada y déjalo en ese adobo durante una media hora.

• Seca con papel de cocina los pimientos para quitarles todo el líquido que tenían en la conserva.

• Pon una sartén al fuego con un chorrito de aceite y pasa el pimiento por la sartén.
• Añade un poco de azúcar para quitar la acidez de los pimientos y reserva.
• Precalienta el horno a 200º.

• Estira la lámina de hojaldre y pon encima y en el centro los piquillos.
• Coloca encima de los piquillos el solomillo con todo el adobo de salsa de mostaza.
• Envuelve el solomillo con el hojaldre, cierra bien los extremos.

• Pinta con un huevo batido y hornea durante unos 15 o 20 minutos o hasta que el hojaldre esté dorado.

Empezamos noviembre con una receta sencilla y perfecta para tomar como cena informal del fin de semana, o como tapa en un aperitivo o merienda, acompañando a una cerveza o a una copita de vino.

La reducción de Pedro Ximenez es una salsa dulzona con un aroma muy especial que contrasta deliciosamente con los demás ingredientes de la tosta o montadito.

• 3 filetes de lomo de cerdo.
• 3 lonchas de queso.
• 1 latita de pimientos del piquillo.
• Pan de bocadillitos o rodajas de pan.
• Aceite de oliva.
• Sal.

• 180ml. de Pedro Ximenez.
• 35g. de azúcar.
• 1 rama de canela.

• Pon un cazo o sartén al fuego con el vino, la ramita de canela y el azúcar, deja que reduzca a fuego muy lento removiendo de vez en cuando, durante unos 10 minutos.
• Mientras reduce el vino preparamos el resto de ingredientes:
• Pon los pimientos del piquillo en una sartén con un poco de aceite de oliva a fuego lento y deja que se hagan lentamente.
• Cuando veas que los pimientos están tiernos, añade la reducción de Pedro Ximenez y deja que siga reduciendo y espesando.
• Salpimenta los filetes de lomo y ásalos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva.

• Abre el panecillo y prepara las tostas.
• Pon una loncha de lomo recién hecho, en el panecillo y sobre cada tosta.
• Pon una loncha de queso encima de cada filete de lomo aún caliente.
• Reparte los pimientos del piquillo por encima del queso y añade un chorrito de la reducción del vino por el pan.